jueves, febrero 23, 2006

CRM OnDemand. ¿Realmente cuesta menos?

A principios de este mes SAP lanzó al mercado su propia versión de un “CRM On Demand” (bajo pedido), una modalidad por la que cada vez más proveedores de software empiezan a apostar. Según Gartner, para el 2008 más de 50% del software se adquirirá en forma de servicio, conformando un mercado que moverá más de 6.500 millones de euros en todo el mundo en los próximos dos años. Este crecimiento se soporta sobre la promesa de que las compañías podrán mantenerse actualizadas en TI sin la necesidad de realizar grandes inversiones, ya que solo pagarán una cuota mensual fija por la utilización del software. Ahora bien, ¿cuál es la realidad detrás de todo esto?

Tal como se muestra en el cuadro inferior, si realizamos un análisis desde el punto de vista estrictamente financiero, utilizando las variables diferenciales, que en este caso son el coste de las licencias, el hardware y el mantenimiento y soporte del software (en caso de adquisición) o el pago mensual (en caso de pago por servicio), veríamos que el Coste Total de Propiedad (o TCO) para un periodo de 5 años, es solo un 10% inferior en la alternativa de pago por servicio, asumiendo que los costes de implantación (o setup) y gestión del cambio son iguales en ambos casos, para los mismos niveles de complejidad.




Como podemos ver, la segunda opción, al día de hoy, significaría un ahorro de 86.000 €, cerca del 9,5%. Sin embargo, este ahorro no se puede comparar limpiamente, ya que en la realidad, ambos productos/servicios no son exactamente iguales. Casi por regla general, el software en propiedad posee un abanico más amplio de funcionalidades disponibles (aun cuando en ambos casos el proveedor sea el mismo), permite un grado de control sobre la información, una flexibilidad y velocidad de respuesta mayor en caso de que los requerimientos del negocio varíen. Adicionalmente, presenta un nivel significativamente menor de complejidad a la hora de requerir integración de datos con otros sistemas residentes en la empresa.

En contraposición, la delegación de todos los problemas de mantenimiento y administración de la aplicación en el proveedor del software, elimina un peso importante de la gestión del departamento de TI y significa un desembolso económico de casi un 65% menos en el primer año de su implantación, lo cual suena bastante atractivo a primera vista.

Desde mi punto de vista, modalidad “On Demand” es viable para aquellas organizaciones que no tienen inconveniente en adaptar sus procesos al funcionamiento de un paquete estándar, ya sea porque no tienen un alto nivel de complejidad, o porque no los consideran un factor diferenciador (o ventaja competitiva) dentro de su mercado.

Igualmente creo, partiendo del hecho de que la mayoría de los proveedores de software (con algunas excepciones importantes), incluyen entre su propuesta de servicios un “programa de migración” desde el modelo “On Demand” al basado en la propiedad del software (también llamado “On Premise”), me hace pensar en que el primero se utiliza (actualmente) principalmente como herramienta de marketing para enganchar al cliente con la finalidad de lograr venderle a mediano plazo el paquete de licencias en propiedad.